Ilustración de @un_costal_de_huesos (instagram)

El pasado 14 de marzo en Barcelona realizamos un Acto de Memoria y Homenaje a Miller Correa, líder indígena del Pueblo Nasa, en el segundo aniversario de su asesinato. Aquí las palabras que dedicamos las asistentes a este acto hacia Miller y su familia:

“Pasaron dos años tu asesinato. Todavía quedan muchas incógnitas por resolver. Si nos preguntan quién eras decimos que fuiste tuthenas de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca, la ACIN. Que el pueblo nasa había confiado en ti como autoridad propia, como voz que pudiera representar los sentires y pensares de un pueblo originario que se ha convertido en un referente para quienes sueñan otros mundos en Colombia, y también fuera de ella.

Porque ya ves, que nos separa un océano y miles de kilómetros, y sin embargo, como no sentir que la defensa de la tierra y la vida también es nuestra lucha? Algunas tuvimos la suerte de conocerte o conocer la lucha del pueblo nasa, y comprendimos demasiadas cosas trascendentales para la vida y la lucha. A veces cosas muy simples, como la importancia de lo comunitario para enfrentar lo que sea, para crear otras realidades. Otras mucho más complejas y dolorosas, como que hay un entramado de violencia colonial latente, como que los territorios fértiles y ricos en bienes comunes estan y seguiran en disputa, que el narcotráfico solo es un capítulo más de una larga historia de instrumentalización del territorio y del intento de desaparecer lo comunitario y originario que representa el pueblo nasa. La dimensión que implica que los crímenes cometidos históricamente queden en la impunidad, pero que ésta se perpetúe con 436 homicidios en los últimos 7 años y muchas otras violaciones de DDHH.
Tal vez, una de las mas graves, es algo en lo que tu siempre insistías: como la guerra arrincona a la juventud. La lucha contra el reclutamiento forzado de jóvenes se ha convertido en una de las más riesgosas. La guardia indígena rescata menores de edad constantemente de los grupos armados, y conocemos de la importancia de proyectos para cuidar a niñas y niños, las semillas de un pueblo que deben germinar para su pervivencia

Por eso hablamos de ti Miller, aunque podríamos hablar de Cristina Bautista, de Albeiro Camayo, de Rogelio Chate, Sandra Liliana Peña, Beatriz Cano, Abelardo Liz, y tantas otras que sus familias y comunidades han quedado quebradas con su partida. Te hablamos con el empeño de que no te conviertas en una cifra en ese doloroso recuento que se lleva en Colombia de asesinatos a quienes apuestan por lo comunitario, por otra relación con la tierra que nos da vida.

Te hablamos también porque en tu memoria y en la de tantas otras compañeras asesinadas encontramos no solo el dolor, sino la esencia por la que seguir creando, construyendo, imaginando, y también, algo importante que comprendimos con ustedes, reencontrandonos con mundos que existieron y todavia existen y resisten.

Miller: Vives en nuestros corazones y en nuestra lucha”